EL ZAR DEL JAZZ

El Gulag era una institución en toda la Unión Soviética, pieza clave del sistema represivo de Josef; era la red de sus concentraciones llamadas más amigablemente campos de trabajo correctivo, fue la esclavitud que impulsó su economía. Entre sus ilustres prisioneros estuvo este gigante de la trompeta, conocido como The White Louis Armstrong; fueron 8 sus añitos como esclavo, armando big bands y tocando sin descanso; privado de su libertad, el único medio de expresión se volvió su trompeta; aquella que le había traído tanta gloria durante la Gran Guerra Patria, incluso Stalin le había dado el visto bueno a su banda; durante esas épocas de sangre adquirió bastante éxito en todo el país, en especial las zonas ocupadas a Polonia; lugar dónde había sido una sensación antes de las hostilidades, por estos tiempos es cuando gana su fama mundial; parecía que nada le podría salir mal cuando los nazis invadieron, una vez más se vio forzado a huir de sus compatriotas; la primera vez lo tuvo que hacer de su natal Alemania, porque ser judío interpretando música de negros no ayudaba, incluso si se llamaba Adolf; mucho tiempo atrás ya se había cambiado su nombre por el de Eddie Rosner, un trompetista como los hay pocos, aclamado a ambos lados del océano. Al final logró salir de la U.R.S.S. para regresar al lugar que lo vio nacer, falleció en la miseria total, reclamando su compensación mínima como víctima del nazismo, cuando el gobierno aceptó ya había muerto; una vida dura la suya y eso que era un genio, que vale tanta genialidad si la suerte no acompaña.