FILIPPO EL GRANDE

No se mueve ni vacila como montaña o edificación, así de firme es esa entereza por mantenerse íntegro ante cual sea resolución; la firmeza es básica para las construcciones, de lo contrario como naipes caen; también es fundamental para las personas el ser categórico con sus decisiones, sin dejarse dominar ni abatir. Para esclarecer el asunto recurramos al genio italiano, aquel cuya determinación lo llevó a dar el toque al Renacimiento con su gran descubrimiento, la perspectiva; la tecnología 3D se inició con este fan de Dante, permitió tridimensionalidad en bidimensionalidad, como si el ojo lo viera con sus propios ojos; Filippo Brunelleschi, revolucionó las artes con su aporte cónico, y el mismo fue responsable de la ruptura con lo anterior al imponer un nuevo perfil arquitectónico. Ejemplificado notablemente en Il Duomo di Firenze, 170 años hasta la última piedra; la nave de la Basílica es gótica mientras que su cúpula, renacentista y construida obviamente por Filippo; durante el concurso lo creyeron loco porque mostraba magnífica obra sin decir cómo realizarla, firme se mantuvo, no lo revelaría hasta que gane; se presentó el conflicto del huevo, Filippo retó a los concursantes en poner un huevo vertical sobre pedazo plano de mármol, para el vencedor la gloria; inútiles todos ninguno pudo, Filippo agarró uno y de un extremo le dio un golpecito contra la superficie, dándole soporte; frente a las protestas de cualquiera lo hubiera hecho, Filippo el grande les contestó riendo; claro, sabiendo cómo cualquiera la hace.
“Sé firme como una torre, cuya cúspide no se doblega jamás al embate de los tiempos”
Alighieri

1 EXPRÉSATE:

Stultifer

En eso reside el arte. No en hacerlo, sino en saber hacerlo y hacerlo el primero.

 
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