A través de la historia se puede ver que los semitas no han sido muy queridos y ese sentimiento se ha mantenido dentro del subconsciente colectivo de la humanidad, todo comenzó varios siglos atrás cuando la civilización recién se forjaba y el politeísmo era el estándar; los dioses principales de cualquier pueblo tenían su correlato divino en otras culturas, si un egipcio se encontraba con un griego le decía: ¿Acaso mi Osiris no es tu Zeus? Este último no podía faltar a la verdad y asentía; los antiguos no tenían mucho problema con alabar más dioses con tal ya lo hacían con varios, unos más unos menos no había gran diferencia, a fin de cuentas eran los mismos pero con diferentes nombres. En ese mundo donde las personas son libres de profesar el culto a quien les dé la gana aparece un grupo que cree en un único dios (hasta allí no hay problema pudiendo tener varios ellos eligieron uno, O.K.) y además es el verdadero (¿Acaso insinúan que los dioses de los demás son falsos?) La gente vivía tranquila, sus deidades no eran más verdaderas que las otras sino simplemente también eran posibles; Yahvé, único y verdadero, obviamente las reacciones no se hicieron esperar; esta pandilla de rebeldes monoteístas despreciaba al mundo politeísta, era indigno, impío, infiel, por eso en la Torá Dios se dedica a castigar a todos los que puede y su pueblo se dedica a amenazar a todos que su dios los va castigar; ¿A quién le gustaría que venga un grupo de fanáticos diciendo que su dios está molesto, así que se debe ser menos libertino? Existe una cierta predisposición hacia el antisemitismo que viene desde la antigüedad pero serlo o no es una cuestión netamente cultural; se aprende, no se nace así.
Literalmente...
Hace 12 años
2 EXPRÉSATE:
Qué loco: pensaría que este iba a ser el post más leído.
Solo puedo añadir: ese Moises pes, es un conchasumare.
Anónimo
yo tambien tengo algo ke añadir: Pene
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